Cuidado con las cámaras escondidas en los hostales

En su primer aniversario de casados, Claudia y Esteban querían hacer algo especial. Como cualquier joven pareja, trataban de evitar la rutina y mantener encendida la pasión que sentían uno por el otro. Ella tenía 29 años, y él, 31. Estaban muy enamorados, pero el peso del día a día ya se dejaba sentir. Por ello decidieron realizar algo diferente, que les trajera de vuelta a aquellos tiempos no tan lejanos en que su relación era fulgurante. No planearon nada, salieron juntos del departamento a ver qué les deparaba la noche. Un hostal en Miraflores los conquistó, a solo S/.80 la habitación. En la recepción una jovencita de unos 22 años los atendió amablemente. Cuarto 304.

Subieron al tercer piso sin decirse casi nada, mucho más decían las miradas. Ella entró despacio y él detrás, despacio también. Cuando la puerta se cerró, sin meditarlo, sin previa de por medio, se devoraron. No tuvieron inhibiciones, contemplaciones. Renovaron así el amor que se habían prometido. Estaban extasiados, aún cuando salieron del hostal la mañana siguiente, y siguieron con su vida de esposos que había tenido en esa noche tan especial, no un escape, sino una consolidación.

ACTRIZ DE "EL HUECO"

Tan solo tres semanas después del maravilloso encuentro, un amigo del trabajo llamó a Esteban por teléfono: tenía algo muy importante y delicado que comentarle. Le contó que había encontrado un video de contenido sexual, llamado Porno en telos cholos en el que aparecían él y su esposa, nada menos que en el conocido centro comercial "El Hueco", a solo tres luquitas. Solo entonces se dio cuenta de que aquella noche tan especial había sido grabada con todo detalle por una cámara escondida en la habitación y que su intimidad había sido expuesta a un público masivo. La más afectada fue, sin duda, Claudia, que humillada en su dignidad de mujer, no podía salir tranquila a la calle ni hablar con nadie porque sospechaba que tal vez habían visto el video.

La práctica de ocultar cámaras en los cuartos de los hoteles no ha menguado. Por el contrario, este acto ilícito, que además se ha convertido en un gran negocio, está en todo su apogeo. "El gerente del hotel simplemente se lavó las manos y juró que desconocía que existía una cámara en la habitación. ¡Qué mal que estemos expuestos a esta gente! Lo peor es que no se les puede hacer nada. ¿Es una mafia? ¿Está penado por la ley?", se preguntó Esteban, que no es ninguna estrella de la industria pornográfica, sino solo un simple vendedor en una tienda de relojes.

TRES AÑOS DE CÁRCEL

De hecho, algunas cifras apuntan a que el 30% de los hoteles y hostales de los conos y zonas populares incurren en esta "payasada". Y sí, efectivamente, estos videos que comercializan en el Centro de Lima, mercados o vendedores ambulantes en la mayoría de distritos, a vista y paciencia de hombres y mujeres de todas las edades. Hoteles de Lima es otro buscadito. Se trata a todas luces de un delito, como explica el conocido abogado Luis Tudela: "Estamos hablando del delito de violación a la intimidad, está penado y sancionado en el Código Penal hasta por tres años de pena privativa de la libertad". El letrado revela que la denuncia recae en la persona que hace la difusión del video. "Nadie tiene derecho de exhibir a otra persona sin su autorización, mucho menos ser comercializado. Desde la época del programa Magaly Tevé, cuando pusieron una cámara en una habitación, los llamados 'prostivideos', se ha hecho un negocio redondo y nadie hace nada", añade.

DIRECTO A 'CHOLOTUBE'

Este no es el único medio en que se difunden los videos de estos encuentros carnales, sino que también hay varias páginas web que lo hacen en el ciberespacio, entre las que destaca la infame Cholotube. Esto es mucho más grave, puesto que basta que algún inescrupuloso sujeto suba fotos o videos íntimos por unos contados segundos en alguna página pornográfica para que estos circulen por mucho tiempo en varios otros de estos portales. "Estos delitos son calificados como menores, no son tomados en cuenta, ante tantos delitos mayores, siniestros, que vemos todos los días. Que la hija mata a su madre, que los marcas asesinan a diestra y siniestra. Entonces, si alguien graba sin autorización a una pareja lo dejan de lado, pero claro que es un delito grave. Es triste, pero día a día convivimos con lo ilícito y lo aceptamos. Grandes aludes comienzan con piedras que caen desde lo alto. Hay que tomar cartas en el asunto de manera inmediata", agrega Tudela.

CASOS Y COSAS

Gustavo y Marifé pasaron por una situación similar a la de Claudia y Esteban. Alrededor de las tres de la madrugada, en un ataque de furia, Gustavo llegó a la puerta de la casa de Marifé exaltado y profiriendo toda clase de improperios contra su enamorada. Le encaró que se había acostado con otro y que el video estaba en Internet. Ella, una chica de 19 años, no entendía qué estaba ocurriendo. Gustavo, enfermo de rabia, le dijo: "Te voy a mostrar lo puta que eres". Vieron juntos el video, en el que efectivamente aparecía Marifé manteniendo relaciones sexuales con un hombre. Ella entró en 'shock' al ver las imágenes en la pantalla. Más grande fue la sorpresa para Gustavo, cuando Marifé le hizo notar que el coprotagonista del video era él mismo. A Gustavo no le quedó nada más que deshacerse en disculpas. Sin embargo, no sabemos de qué hubiera sido capaz ciego de celos, tal vez podría haberla golpeado, podría tal vez incluso haberla asesinado; como tantos casos que adornan los portadas de diarios y noticieros.

La idea de encontrarse con uno de estos materiales y reconocerse en ellos, o ver en ellos a una amiga, a una novia, a una prima, a una hija o a una hermana pueden tener consecuencias devastadoras. El trauma que se deriva de estas experiencias puede ser realmente martirizante, sobre todo para las mujeres, para quienes no solo significa una exposición de su intimidad, sino la posibilidad de que esto se convierta en una cara más del complejo poliedro de la violencia contra la mujer.

No tiene nada de malo buscar alternativas que le den sabor a la vida sexual de la pareja, como en el caso de Claudia y Esteban o Karen Schwarz y Ezio Oliva. Cada quien es libre de experimentar su sexualidad de la manera que más le apetezca, siempre y cuando sea consentida. El problema surge cuando se consumen esa clase de videos (los de las cámaras escondidas y los que han sido sustraídos sin permiso de los involucrados), porque entonces nos volvemos cómplices de un delito.

Dorita para todos. La bailarina y actriz cómica Dorita Orbegoso también fue víctima de estos sujetos. Quién no recuerda cuando en 2010 apareció bañándose en un cuartel militar, tras haber sido vilmente grabada por miembros del Ejército. Tristeza, indignación, vergüenza y miedo sintió la morena al verse expuesta de esa manera frente a todo el país. Una carta de disculpas de Otto Guibovich, en esos años comandante general del EP, calmó a la artista. Hasta ahora circulan dichas imágenes en mercados del Centro de Lima a S/.2,50.

Aquí las esconden:

-Espejo: Si se ve doble significa que tiene fondo y puede haber una cámara.

-Cuadros: Las instalan detrás para no despertar sospechas.

-Clóset: Los dejan semiabiertos con cámara encendida.

-Techo: Es un buen lugar para grabar a las parejas en pleno acto sexual.

-Televisores: Las cámaras son tan pequeñas que las instaladas en el botón para encender, incluso algunas tienen luz infrarroja.

El fiscal decide. La Policía informó a Correo Semanal que las personas filmadas en hostales pueden denunciar el hecho directamente ante el Ministerio Público (MP), y dependerá del fiscal si acoge la denuncia por violación a la intimidad.

Señaló que si la víctima presenta la denuncia en cualquier comisaría de todas formas será derivada al MP.

"Ocurre también que las parejas grabadas no denuncian porque generalmente la compañía con la que salen no es la oficial", expresó un oficial entrevistado.