El espeleólogo español Cecilio López Tercero, quien estuvo atrapado durante 12 días en una cueva de Amazonas, consideró que el accidente -el primero de su carrera, iniciada en 1992- se produjo en "uno de los peores sitios en los que pudo ocurrir". Ayer le dieron de alta.
Tras agradecer a todas las personas e instituciones involucradas en su rescate, explicó que lo inaccesible del lugar y el poco conocimiento geográfico que se tiene sobre él, complicaron mucho las tareas de los socorristas nacionales y extranjeros.
TESTIMONIO
Visiblemente recuperado, y siempre de buen humor, aseguró que las primeras horas tras el accidente fueron las más difíciles, pues los intensos dolores y el frío lo pusieron al borde de la muerte. "Fueron cuatro horas y media que estuve solo. Estaba mojado, tenía dolores muy fuertes. Pude haber muerto por hipotermia; estaba ya casi al límite", relató.
El explorador también aclaró que el accidente se produjo cuando, al terminar su jornada, retornaba a la superficie de la cueva. "Un bloque se desplomó y caí al suelo. En ese momento, noté que la situación era grave y que no iba a poder salir por mis propios medios", narró.
DE ALTA
Los médicos de la Clínica Angloamericana, en la que fue internado cuando llegó a Lima, informaron que el explorador ya está en condiciones de alta, pero que permanecerá hospitalizado hasta que terminen las coordinaciones de su viaje a España, donde culminará su recuperación en aproximadamente un mes.
López Tercero añadió que, tan pronto como le sea posible, volverá a explorar cuevas, actividad que lo apasiona. No descartó regresar al Perú para culminar el trabajo iniciado en Intimachay.