Causan graves daños, afectan la confianza en el sistema de salud y al año este negocio ilegal mueve US$ 200 millones
Causan graves daños, afectan la confianza en el sistema de salud y al año este negocio ilegal mueve US$ 200 millones

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que la venta de medicamentos falsificados, adulterados, vencidos, robados o de origen desconocido, representan un serio problema de salud pública a nivel mundial, y nuestro país no es ajeno a esta realidad que nos expone a graves riesgos.

El peligro radica en que podríamos adquirir productos ineficaces al tratamiento, aumentar los riesgos de morbilidad y mortalidad, generar resistencia a los antimicrobianos, incrementar las infecciones farmacorresistentes y afectar la confianza en el sistema de salud.

Lamentablemente, nuestro país se encuentra entre los cinco países con mayor incidencia de falsificación de medicamentos a nivel mundial. Se estima que el mercado de medicamentos de procedencia ilegal representa un valor aproximado de US$200 millones al año en el país.

Los analgésicos, antiinflamatorios y antibióticos, son los medicamentos más falsificados en el mercado ilegal, según datos de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid)

Parte del problema es que los seguros que da el Estado y entidades privadas, no cumplen a cabalidad con la entrega de medicamentos, especialmente si hablamos del Ministerio de Salud, EsSalud y el Sistema Integral del Salud (SIS). Dicha problemática la hemos tratado en una entrega anterior.

Estas deficiencias llevan a que los pacientes tengan que salir a buscar medicinas en las calles. Es en este momento en que apelan a productos adulterados por ser más baratos. No saben que se están metiendo en un grave problema.

Para hacer frente a esta situación alarmante y muy crítica, es necesario contar con acceso a un plan de salud básico que incluya servicios de salud y medicamentos, fortalecer los sistemas regulatorios y de control de calidad de medicinas, y concientizar a la población sobre los riesgos de comprar en el mercado no regulado, como el que vemos en mercadillos que todos conocen.

Lourdes Ternero, representante de la Digemid, destaca que es recomendable siempre comprar medicamentos en farmacias y boticas formales, evitando adquirirlos en mercados, ferias, vendedores ambulantes o a través de internet.