Patricia García: “En las últimas dos semanas han empezado a repuntar los contagios”

La exministra de Salud, Patricia García, manifestó que nuestro país vivió semanas atrás una disminución en el reporte de casos confirmados de COVID-19. Sin embargo, advirtió que el panorama ha cambiado en las últimas dos semanas, periodo en que el número de infectados se muestra al alza, incluso en el caso de fallecidos, y que debería generar alerta en la población y el Estado.

“Yo no veo ninguna meseta. Nosotros ya estábamos teniendo una caída de casos en general y lo que estábamos viendo en estas últimas dos semanas prácticamente es que están empezando a repuntar los casos. Despacio todavía, pero es un indicador que esperamos no siga incrementando”, señaló en diálogo con Correo.

García Funegra explicó que esta situación se debería a que, con la apertura de más actividades comerciales producto de la Fase 3 del Plan de Reactivación Económica, las personas tienen una "mayor exposición" y posible contagio del virus.

Si bien, indicó que, en tiempos de pandemia, “probablemente ningún momento es bueno para reabrir las actividades económicas”, instó a la población a cuidarse bajo las medidas de salud ya establecidas: Lavado de manos, uso de mascarilla y distanciamiento social.

“También es un llamado al Gobierno porque ahora debemos reglar las nuevas acciones”, expresó.

“Lo que se necesita en este momento es ir viendo día a día dos grandes actores: la población y el Estado. La población tiene que tener claro que el riesgo (de contagio) está ahí y estamos viendo un mayor número de infectados y más fallecidos, casi se manera sostenida. Y el Estado dándose cuenta de eso también va a tener que ir viendo qué cosas abre o comienza a cerrar”, añadió.

La extitular de Salud sostuvo que existe la posibilidad de aplicarse una nueva cuarentena general si el aumento de infectados y víctimas mortales continúa. Por ello, consideró importante la necesidad de que fortalezca y se amplíe la capacidad de atención de los hospitales en el país, que actualmente se encuentran saturados.

“Nuestra reserva para atención es muy limitada. No tenemos gran flexibilidad para darnos el lujo de que sigan subiendo las cosas. Esa es la parte que me preocupa”, señaló.