Fiesta de la Virgen de Yauca inicia con barrido

El último movimiento sísmico de Coracora acabó por destruir los cuatro ángeles ubicados en la bóveda externa del Templo de Yauca. "Se han caído", dice el rector del santuario, Michel Huamán.

Pese a la tristeza que inunda el corazón de los devotos, los trabajos de restauración de la parte externa del templo prosiguen, pero hay mucho por hacer. "Todavía falta mucho por tarrajear la parte externa", dice.

Lo que sí está finalizado es la parte interna.

"No alcanzan los recursos propios que tenemos. Esperemos la solidaridad de los fieles para acabarlo", señala entusiasta el religioso.

Los trabajos prosiguen y lo que inicia hoy es la fiesta de Nuestra Señora del Rosario de Yauca con la primera novena, prevista para las 6:00 de la tarde.

La tradicional celebración es el primer domingo del mes de octubre, pero se adelantó una semana por las Elecciones Municipales y Regionales del próximo 05 de octubre.

Mañana será el "Día del barrido", donde los devotos acudirán con escobas y plumeros para limpiar el santuario de la Patrona de la provincia de Ica.

Desde el inicio del barrido, que está previsto para las 8:00 de la mañana, también habrá confesiones todo el día y misas cada hora. Por la noche se realizará la segunda novena.

En el día central, que será el domingo 28 de setiembre, habrá confesiones todo el día, así como misa.

El rector Michel Huamán espera la visita de entre 15 y 20 mil devotos el día central. "Cada año vienen más devotos de la venerada imagen; incluso del extranjero para agradecer por el milagro concedido", dice.

Tras el asfaltado de la carretera al santuario, el año pasado el tráfico de unidades vehiculares generó caos porque la mayoría de los fieles prefirió acudir con vehículos propios.

En ese sentido, Huamán recomendó movilizarse con los vehículos públicos para evitar la congestión vehicular, a excepción de personas enfermas que podrían acudir con sus propias movilidades.

Según la historia, el 03 de octubre de 1703 se descubrió la imagen de la virgen, y fue en el mismo lugar que tiempo después se edificó el actual santuario, que tiene más de un siglo de edificación.