Ha publicado el libro “La Expedición Libertadora del Perú”. FOTO: LINO CHIPANA EL COMERCIO
Ha publicado el libro “La Expedición Libertadora del Perú”. FOTO: LINO CHIPANA EL COMERCIO

El historiador peruano Héctor López Martínez ha escrito “La Expedición Libertadora del Perú”, un libro editado por el Instituto de Estudios Histórico-Marítimos del Perú, a propósito del Bicentenario de la Independencia.

Con maestría y documentación, López reconstruye un momento histórico vital y complejo, con sus protagonistas y adversidades.

El autor, además, entrega diversas dimensiones del libertador José de San Martín, no solo en su faceta de estratega y militar, sino también de hombre de letras, un gran conocedor del Perú y asiduo lector de los “Comentarios reales de los incas” del Inca Garcilaso de la Vega.

¿Cuánto tiempo le tomó hacer el libro?

Es un libro que difunde los aspectos interesantes relacionados con nuestra historia. Abordé la expedición libertadora, un tema muy complejo. Me demoró 10 meses aproximadamente y he procurado, que se conozca el tema desde sus orígenes : la decadencia del imperio español, luego de haber tenido una etapa brillante con Carlos III. Asume el trono su hijo Carlos IV que es toda una desgracia; vienen las pugnas entre él, su hijo Fernando. Es la decadencia de la que se aprovecha Napoleón Bonaparte, quien busca invadir Inglaterra, hace un pacto con España, pero es un pretexto para invadirla.

Era una época de cambios de ideas, donde ya se cuestionaba la monarquía como forma de gobierno...

Por supuesto. Paralelamente a la crisis de la monarquía española, se están instituyendo puntos fundamentales de la Revolución Francesa. La constitución de Cádiz recoge muchos elementos ya sustentados durante la Revolución Francesa: la libertad de prensa, libertad de pensamiento. Una serie de cosas importantes que van a posibilitar y generar una opción diferente a la monárquica.

A pesar de esto, San Martín pensaba que una monarquía era viable aquí...

La idea de San Martín también es compartida por muchas personas que creían que los pueblos de América no tenían la suficiente madurez, capacidad, para que pudieran asimilar un cambio tan drástico, radical. La monarquía era la forma de gobierno que habían conocido y era una monarquía pero independiente y liberal.

Hubo momentos de anarquía en algunos lugares liberados...

Claro. No he hecho una biografía de San Martín, pero es el personaje eje de los acontecimientos. En sus cartas, en muchos testimonios, él siente un verdadero terror y horror a la anarquía.

Con tantas biografías, estudios, investigaciones sobre San Martín, ¿qué certezas se puede decir del personaje histórico?

No se ha remarcado, de una manera más amplia, que San Martín no solo era un gran militar, sino que también fue un hombre culto, que leyó mucho, con intereses en muchas materias y que siempre está relacionado a los libros. Fundó, por ejemplo, la Biblioteca de Mendoza, mientras preparaba la expedición libertadora de Chile, donde también deja una Biblioteca Nacional. Después hará lo mismo en la Biblioteca Nacional de Lima. A las tres les donó libros de su biblioteca personal.

También nos dejó la bandera...

El sueño de San Martín es un cuento de Abraham Valdelomar. Nuestra bandera tiene la forma de la Cruz de San Andrés: una equis por cómo fue crucificado en Patras, Grecia. También se llama la Cruz de Borgoña. Sus conocimientos heráldicos son muy amplios. El rojo: la sangre, la fuerza. El blanco: la virtud, la pureza, la Cordillera de los Andes. Y, en el escudo, está el sol de los Incas. Él conocía las leyendas de Manco Cápac y Mama Ocllo. La idea estaba en el conocimiento de San Martín: el sol de los Incas, las montañas de los Andes y el mar, la vía por la que vino, y los laureles de la gloria. Hay una explicación y no el sueño de San Martín, que es un hermosísimo cuento pero es literatura.

¿Qué tan importante fue declarar la independencia de Lima?

Fue muy importante que Lima hubiera declarado su independencia. Hay ciudades que tienen una fuerza y un atractivo muy grande. Y, además, San Martín ya traza la ruta, en primer lugar, para llegar, que es la del mar, y también la ruta que continuará Bolívar más adelante.

¿Qué lecciones resalta de ese momento que puede servirnos ahora, en especial con el inicio de un nuevo gobierno?

Pensando no solo en el Perú sino también en el continente. Las grandes tragedias de los pueblos se han originado por los enfrentamientos internos, el caos, las ambiciones, el caudillaje. Eso siempre ha sido la fuente de la discordia. O por querer imponer doctrinas que solo conducen al autoritarismo, bien sea de derecha o izquierda. Los pueblos crecen y se engrandecen en la democracia. Lo que nosotros debemos hacer es procurar sostener una democracia y fortalecer las instituciones.

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