Imagen
Imagen

Los invasores que quisieron hoy usurpar terrenos eriazos en la sección E1 y E2 de la irrigación Majes no les importó dar su versión a la prensa y solo optaron por la violencia. Muestra de ello, una turba de más de 300 personas persiguieron al corresponsal de diario Correo, Manuel Torres, quien para librarse de la turba tuvo que esconderse y ponerse a buen recaudo.

El taxista que lo trasladó a la zona al promediar las 05:00 horas de la mañana para cubrir su labor periodística también huyó para no ser alcanzado por la turba,  que en lugar de hablar con la prensa optaron por arrojar piedras a matar. Muestra del resultado de tanta violencia, fue el vehículo cuyas lunas y parabrisa quedaron trizas.

"Tuvimos que escondernos sino nos hubieran matado a pedradas", dijo Manuel Torres.

TAGS RELACIONADOS