Pese a que ayer Lima alcanzó los 26 °C de temperatura, la playa La Herradura, en Chorrillos, lució sin gran número de bañistas, a diferencia de balnearios de la Costa Verde, como Agua Dulce, que lucían abarrotados de limeños que buscaban refrescarse del calor con un baño de mar.

En un recorrido que llevó a cabo Correo por esa playa, se pudo ver la poca afluencia de veraneantes, quienes llegaban en vehículos particulares o caminando. Al parecer, los desanima la gran cantidad de piedras y la poca limpieza que exhibe este balneario chorrillano.

Sin embargo, lo que sí hay son vendedores ambulantes de comida y bebidas. Solo 15 de ellos están autorizados por la Municipalidad de Chorrillos, el resto se han quedado desde la temporada navideña, sin que las autoridades hagan algo al respecto, dijo un comerciante formal.

La seguridad no está garantizada en La Herradura, pues no se vio a efectivos del serenazgo vigilando el lugar. Solo un patrullero de la Policía llegó por 15 minutos y continuó con su recorrido.

De otro lado, pese a que está prohibida la venta de cerveza, los veraneantes consumían licor sin mayores problemas.

NO ES SALUDABLE. La bandera azul de playa "saludable" brilla por su ausencia en La Herradura. La única que se coloca los fines de semana es la que indica la bravura del mar, indicó un bañista.

El OLÓN. Como se recuerda, fue la playa emblemática de la gestión de Susana Villarán. Se intentó ganar un espacio de arena para los bañistas, pero el mar le jugó una mala pasada a este proyecto edil.

El 22 de diciembre del 2011, horas después de la inauguración del malecón, en el que se invirtió S/.11.8 millones, gran parte de la arena que se colocó a lo largo de toda la orilla fue arrastrada por la corriente marina, con lo que la superficie rocosa volvió a quedar expuesta.

Debido a esta bochornosa situación, desde la comuna limeña se ensayó una justificación por demás desatinada que ocasionó una serie de críticas.

, presidente de la Autoridad del Proyecto Costa Verde, quien estuvo al frente de la recuperación del malecón de La Herradura, dijo en su momento: "Hemos tenido la mala suerte de que ha habido un olón y una llegada de mar potente y fuerte que nos desmaquilló la situación, que fue muy linda y volverá a ser muy linda..."