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El caos que suele verse en la esquina formada por los jirones Moquegua y Mariano Núñez de la ciudad de Juliaca (San Román) nos puede dar una idea clara de uno de los mayores problemas de la Ciudad de los Vientos: el comercio ambulatorio.

PROBLEMA. Durante casi todo el día, decenas de comerciantes se apoderan de esta zona, se instalan en triciclos, ocupan las aceras, ponen altoparlantes para ofertar sus productos, otros optan por gritar y se interponen al tránsito que debería de fluir ininterrumpidamente por esta parte de la ciudad. Ciertamente la esquina es caótica, en los horarios más difíciles, un vehículo de transporte público puede demorar hasta 20 minutos en avanzar solamente esta cuadra.

Esta esquina es apenas una muestra de lo que en Juliaca se replica en casi todo el cercado y en alrededores de los principales mercados. Los días lunes y jueves son peores, son jornadas de feria y los comerciantes se apoderan de toda la marcha citadina.

AMBULANTES. Es notorio que el número de comerciantes ha crecido, aunque no hay cifra oficial que nos confirme la cantidad exacta de vendedores, el problema del comercio ambulatorio ya es un dolor de cabeza que no tiene cuándo acabar. Veamos.

CIFRAS. Correo consultó con el secretario general del Sindicato Único de Comerciantes Minoristas y Mayoristas San Román (SUCCMMA), Elías Mansilla Escalante, el número de vendedores en la Ciudad Calcetera. Su respuesta fue que en esta localidad se calcula unos seis mil comerciantes en las calles, supone el dirigente que el crecimiento es diario.

“Por día aumentan de dos a tres comerciantes que ocupan la vía pública”, nos dice.

Por su parte, el subgerente de Centros de Abastos y Camales de la Municipalidad Provincial de San Román, Nicanor Larico Mamani, señaló que se cuenta con siete mil comerciantes informales aproximadamente.

A NIVEL GENERAL. En la Gerencia de Servicios Públicos de la Municipalidad Provincial de San Román tienen una cifra más preocupante aún. En esta dependencia edil dicen que los comerciantes superan los 25 mil soles en todas las calles, es decir que este registro contempla una proyección general y no por sectores como los dirigentes de comerciantes nos han indicado.

El registro proviene del año 2014 y se está pensando hacer una actualización, pero ese es un trabajo pendiente para los meses venideros en la gestión del alcalde Oswaldo Marín Quiro.

RECORRIDO. Correo hizo una rápida visita por los principales lugares donde se ubican los comerciantes ambulantes, eso nos ayudaría a proyectar de cómo se encuentra la Ciudad de los Vientos en cuanto a comercio se refiere.

Por el Centro Comercial número 2 se constató que existen aproximadamente 60 comerciantes en su alrededor. No obstante, no es una cantidad exacta, porque los comerciantes se turnan a ciertas horas.

Por ejemplo, en el caso de la calle Huayna Cápac, donde en el día existen comerciantes que venden ropa y otros productos similares, en la noche desaparecen para ceder los sitios a vendedores de comida.

Un poco más allá está la calle Moquegua, la más concurrida de la localidad. Desde su primera cuadra hasta llegar a la avenida Circunvalación (más de 10 cuadras) se constató que existen 360 comerciantes, todos en la vía pública.

En este lugar se ha identificado un problema mayor, muchos de los que ahora ocupan las calles y aceras, también tienen tiendas comerciales en esta zona, lo que implica que estarían doblando sitios y contribuyendo al caos, incluso en perjuicio de los peatones.

En el cuadro adjunto podemos apreciar la cantidad aproximada de comerciantes que se han posesionado de las calles.

En la municipalidad calcetera, simplemente no hay respuesta de cómo se empezará a solucionar este problema. Pese a las problemas electorales que están vigentes desde la campaña del año 2014.

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