Las lluvias intensas continúan generando estragos en diversas regiones del país, afectando calles, viviendas y servicios básicos. De acuerdo con un informe conjunto del CENEPRED y SENAMHI, el periodo julio–septiembre estará marcado por un aumento del riesgo en zonas vulnerables, producto de la combinación de precipitaciones, bajas temperaturas, suelos saturados y alta humedad. Una de las infraestructuras más comprometidas en este contexto es la red de agua potable y alcantarillado.
Juan Durand, especialista de la empresa Pavco Wavin, advirtió que muchos sistemas de saneamiento urbano no están preparados para resistir eventos climáticos extremos, y esto se debe en gran parte a la utilización de materiales deficientes, conexiones improvisadas y la falta de mantenimiento periódico.
Frente a esta situación, el especialista propone cuatro soluciones prácticas que pueden aplicarse para reforzar las redes de agua y desagüe, utilizando tuberías de PVC, un material más resistente, durable y de fácil instalación:
- Sustitución de conexiones improvisadas: Muchas viviendas aún emplean uniones caseras que colapsan fácilmente ante suelos saturados por lluvias. Las tuberías de PVC, con accesorios y conexiones inyectadas, reducen las filtraciones y aseguran mayor durabilidad.
- Refuerzo del sistema de desagüe: El uso de tuberías certificadas con una correcta compactación del suelo garantiza el flujo de aguas servidas sin roturas ni rebalses, evitando el colapso de calles o la contaminación de redes de agua potable.
- Instalación rápida en zonas de emergencia: Por su ligereza, las tuberías de PVC permiten restablecer los servicios básicos en menor tiempo, a diferencia de otros materiales más pesados como el HDPE, que requieren termofusión.
- Prevención en nuevas construcciones: Las tuberías de PVC son una solución eficaz y resistente para proyectos públicos y privados, especialmente frente al cambio climático y la inestabilidad del terreno.
“El primer paso para reducir los impactos de las lluvias es contar con redes de agua y desagüe construidas con materiales adecuados y por personal capacitado”, remarcó Durand. Añadió que esto permite proteger a las comunidades y evitar emergencias sanitarias, además de asegurar la funcionalidad del sistema a largo plazo.
Desde Pavco Wavin, se insiste en la necesidad de impulsar sistemas de saneamiento eficientes y resilientes, que mejoren la calidad de vida de las familias peruanas y fortalezcan la infraestructura urbana frente a las lluvias y futuras emergencias.