Celebró su cumpleaños 125 en Huánuco. Es el usuario más longevo del programa Pensión 65 y ejemplo de vida saludable y resiliencia.
Celebró su cumpleaños 125 en Huánuco. Es el usuario más longevo del programa Pensión 65 y ejemplo de vida saludable y resiliencia.

Marcelino Abad Tolentino, más conocido como ‘Mashico’, acaba de cumplir 125 años y su historia ha conmovido a todo el Perú. Nacido en 1900 en la comunidad de Cochachinche, en el departamento de Huánuco, ‘Mashico’ se ha convertido en el usuario más longevo del programa Pensión 65, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), y en un verdadero símbolo de sabiduría, vitalidad y amor por la vida.

Desde niño enfrentó duras pruebas: quedó huérfano a temprana edad y tuvo que aprender a sobrevivir por su cuenta, en medio de la naturaleza y los caminos difíciles de su tierra natal. Hoy, con una sonrisa y un espíritu admirable, celebra sus 125 años rodeado de cariño en la casa hogar “Mis abuelitos”, donde vive actualmente.

¿Qué hay detrás de su longevidad? Según Mashico, su secreto está en la alimentación natural, rica en frutas y verduras que él mismo cultivaba durante décadas en lo que llamaba su “bosque del Edén”. Su dieta incluye alimentos como palta en el desayuno y pachamanca de carne, sus favoritos. Además, mantiene una rutina que incluye conversaciones, paseos en silla de ruedas y mucho afecto por parte del personal que lo cuida.

El promotor de Pensión 65 en Huánuco, Misael Ayra, recuerda cómo fue encontrado en 2019 en una zona alejada de Cochachinche, sin DNI ni acceso a servicios del Estado. Fue gracias a la articulación entre el programa Pensión 65, la municipalidad, Reniec y otras autoridades que Marcelino pudo ser documentado y recibir atención integral.

“Cada vez que lo visitábamos antes de ingresar a la casa hogar, nos ofrecía los frutos de su huerto. Era como recibir vitalidad en cada visita”, relató Ayra. Por su parte, Dolores Pérez, cocinera de la casa hogar, señaló que la palta sigue siendo indispensable para él. “No puede vivir sin su palta. La pide todos los días por la mañana”, comentó.

La celebración de su cumpleaños no pasó desapercibida. Empresas como Gloria y Luz del Sur se sumaron al homenaje, donando alimentos, ropa, abrigos, juegos de ollas y cocina para apoyar a la casa hogar y a todos sus residentes.

Mashico es un ejemplo viviente de que una vida sencilla, natural y alegre puede prolongarse mucho más de lo que imaginamos. Su historia no solo inspira, sino que también pone en valor la importancia de cuidar a nuestros adultos mayores y reconocer sus historias como parte fundamental de la identidad del país.

TAGS RELACIONADOS