Municipalidad de Lima interviene al día 80 taxis-colectivo
Municipalidad de Lima interviene al día 80 taxis-colectivo

Desde el último lunes, la Municipalidad Metropolitana de Lima ha llevado al depósito un promedio de 80 taxis-colectivo al día y ha sancionado a sus propietarios con multas de entre S/.760 y S/.1900.

Sin embargo, los propietarios de estos vehículos, que son usado para brindar un servicio ilegal, pagan la multa y siguen infringiendo las normas de tránsito.

"El lunes intervenimos 70 vehículos. Antes del mediodía del martes ya habían sido retiradas 40 unidades, pues sus propietarios pagaron las multas", informó a Correo Hugo Valderrama, subgerente de Fiscalización del Transporte de la comuna limeña.

Si los infractores reinciden, la multa se duplica y los vuelven a internar, si es que los inspectores municipales de transporte los sorprenden in fraganti.

El municipio le ha declarado la guerra a los colectiveros con constantes operativos en diversas zonas de la ciudad, pero apenas los inspectores se van, los "llamadores" reaparecen y tras ellos asoman los taxis-colectivo.

CUIDADO

Los más "bravos", según Valderrama, son los colectiveros que unen Lima y Callao, desde el jirón Paruro hasta La Punta. "Son delincuentes. En cada intervención agreden al personal", advierte.

La golpiza al inspector Héctor Lorado Aquino que le propinó el colectivero Julio César Sousa Sousa hizo que la comuna refuerce las medidas de seguridad.

Desde el último miércoles, cuando los vehículos intervenidos son llevados al depósito del Servicio de Administración Tributaria (SAT), en el jirón Manuel Tellería, del Cercado de Lima, son escoltados por policías en moto.

Los colectiveros que van a Chorrillos ocupan el segundo lugar entre los más problemáticos. "Usan a los llamadores para que les den seguridad. Muchos de ellos son delincuentes", afirma Valderrama.

EN COCHERAS

Para evadir a los inspectores de tránsito, los taxis-colectivo se refugian en playas de estacionamiento, donde embarcan los pasajeros.

Correo comprobó que en el jirón Cañete, en el Centro de Lima, hay una cochera desde donde parten los autos a Puente Piedra y Ancón, mientras que en la avenida Tacna están las que albergan a unidades que se dirigen a Comas. Las minivan que van a Chosica parten de una cochera cerca a la plaza 2 de Mayo.

Para detectar las cocheras clandestinas, Valderrama asegura que el municipio realiza una labor de investigación y coordina con la Gerencia de Fiscalización, con el fin de que las cierre.

Estima que de los 150 mil taxistas autorizados para circular en Lima Metropolitana, 100 realizan taxi-colectivo, en determinadas zonas y horarios. Ni qué hablar de los taxistas no autorizados.