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A las pocas horas de difundirse un revelador informe sobre la disipada vida de los internos en el penal de Lurigancho, la Policía Nacional destituyó al director de la prisión y separó a todos los oficiales responsables de la seguridad. Pese a sus esfuerzos por aclarar que las imágenes propaladas por el programa Panorama corresponden a otra gestión, el coronel Eduardo Humberto García de la Cruz no pudo explicar algunos graves hechos, como el uso de celulares y la existencia de una discoteca, en los que están envueltos los internos de Lurigancho. En su defensa, el coronel García de la Cruz dijo que la denuncia fue realizada por los familiares de algunos internos perjudicados por el decomiso de los celulares durante las requisas en el penal.

Fiesta brava. Para nadie es un secreto que desde las prisiones se realizan las extorsiones y salen las órdenes para los temibles sicarios que asolan la capital, pero que peligrosos internos del penal de Lurigancho afronten el calor en piscinas armables con cervezas en lata en mano y bailen en “discotecas” con luces multicolores resulta, por decir lo menos, de Ripley.

A lo anterior se añade el libre uso de celulares con acceso a internet las 24 horas del día, la venta indiscriminada de todo tipo de licores, como whisky, cervezas en lata y pisco sour, y el cobro hasta por la “paila” (comida) que se reparte a los reos.

Gracias al testimonio de los familiares y de los propios reos se conoció que en el pasado mes de marzo se instalaron dos piscinas armables en el patio del pabellón 11-A para que los internos disfruten del verano “como se debe”.

Según el informe de Panorama, en el penal de Lurigancho todo tiene un precio y con dinero se consigue de todo. Si un interno quiere ingresar un smartphone tiene que pagar entre 70 y 100 soles, 15 soles por una cerveza heladita y 15 soles por la paila canera.

Los denunciantes acusaron al delegado de la prisión, Esteban Quispe Quintalla, y al director del penal por todos los cobros que se realizan en Lurigancho para obtener un beneficio.

Mano dura. El Fuero Militar-Policial y el Ministerio Público abrieron una investigación de oficio en torno al insólito caso en el penal de Lurigancho. Los delitos detectados, en principio, son desobediencia y abuso de autoridad.

La Fiscalía Suprema del Fuero Militar, a cargo del general PNP Julio Bueno Tirado, ya tomó conocimiento del caso y designará al magistrado que se abocará a desentrañar la red mafiosa en ese penal.

Por su parte, la Fiscalía de Lima Este ya recogió la información periodística y procederá a citar a los implicados, entre ellos el exdirector del penal.

Antiguo. El jefe del Inpe, Julio Magá, dijo que el penal de Lurigancho es responsabilidad de la Policía. Además, sostuvo que el video no es del 8 de julio, sino de hace cinco años.

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