Reconocido periodista lucha por su vida

Transcurría el año 1966 cuando Víctor Aliaga Villavicencio junto a un grupo de entusiastas periodistas huancavelicanos ingresaron a trabajar en la hoy extinta “Radio Mercurio”. Con este hecho prácticamente se inauguraba la radiolocución en Huancavelica. Lamentablemente, casi 50 años después, este reconocido comunicador atraviesa el mayor trance de su vida, lucha por sobrevivir internado en una cama de hospital, aquejado de un terrible mal.

TRAYECTORIA. Víctor Aliaga (66) fue conductor de diversos espacios noticiosos e informativos, pero como el mismo decía, se sentía como “pez en el agua” en el periodismo deportivo, su mayor popularidad la alcanzó en ese campo y ello le permitió visitar casi todo el país, cubriendo los reñidos encuentros de la Copa Perú.

Posteriormente ingresó a laborar a Radio Oropesa, la que hoy lleva el nombre de radio Huancavelica, en este medio conducía uno de los programas informativos más sintonizados de la época.

Luego de pasar por diversas radioemisoras, Víctor junto a su pareja, la también periodista Isabel Dueñas, concretaron el sueño de tener su emisora propia y fundaron Radio Libertad, que hasta hoy se mantiene vigente y por donde han pasado innumerables hombres de prensa de la Tierra del Mercurio, que lo recuerdan con cariño y estima por todo el tiempo y los recuerdos vividos allí.

EMPEORA. Por desgracia con el paso de los años la salud de Aliaga decayó sobremanera, la enfermedad de insuficiencia renal se convirtió en su mayor tormento y solo mediante diálisis se mantenía estable.

Según contaron amistades del comunicador, hace unos días sufrió una fuerte caída y también se habría descuidado en practicarse la diálisis, lo que motivo que el mal que lo aqueja entre a fase de insuficiencia renal terminal.

Justamente, buscando salvar su vida sus familiares lo trasladaron de EsSalud Huancavelica (donde permanecía internado) y al Hospital Guillermo Almenara de Lima. Fuentes médicas informaron que las posibilidades de que mejore son remotas. A pesar de ello diversos parientes, colegas y amigos, rezan porque aún no se extinga su vida.