Temor en el INPE por internos con presuntas alteraciones mentales

Familiares de los internos y el propio personal del INPE se encuentran preocupados, pues en el penal estarían recluidos hasta cuatro presos con presuntas alteraciones mentales que representan un peligro para el resto de la población penitenciaria.

Correo tuvo acceso a testimonios y documentos que confirmarían esta realidad, actualmente los reclusos que causan mayor preocupación, son Crispín Sotacuro Guzmán, quien ingresó el 14 de enero del 2015 y purga condena por el delito de parricidio, incluso este interno ya fue declarado ininputable pero permanece en el penal San Fermín de Ascensión.

El último recluso con supuestas alteraciones mentales que ingresó al centro penitenciario es Marco Antonio Belito Huamán, quien tiene prisión preventiva y es acusado de ultrajar a una niña de 5 años.

PELIGRO. El comportamiento de estos cuatro internos a todas luces no es normal, pues según testigos y trabajadores, hablan solos, se ríen sin motivo alguno, se tocan sus partes íntimas a cada momento y todo el tiempo están como idos, como fuera de la realidad, lo que preocupa a sus compañeros, pues temen que puedan adoptar actitudes agresivas.

SIN CUPO. Lo lamentable de la situación, es que autoridades del INPE ya solicitaron cupo al instituto de servicios de salud, del hospital mental Larco Herrera para que algunos de estos internos puedan ser trasladados a este nosocomio; sin embargo, la respuesta fue que por el momento no hay camas disponibles. Por este motivo continuarán en el penal San Fermín causando temor.