Un paseo por la historiaa través de sus reliquias

Conocer las reliquias que resguardan los museos de la ciudad cusqueña, es estar cerca de la historia que ha marcado cada uno de los pasos de los antiguos pobladores y al mismo tiempo es tener la posibilidad de aprender de forma didáctica y gráfica.

Uno de los lugares que alberga gran cantidad de objetos históricos es el Museo Inka de la Universidad Nacional de San Antonio Abad de Cusco (Unsaac), donde con tan solo un recorrido los visitantes pueden aprender sobre la etapa preinca, inca y colonial.

Es de esta forma que tras pasar por las manos de varios propietarios, llegó a ser la casa del almirante español Francisco Alderete Maldonado, por lo que se conoce a este lugar como la Casa del Almirante.

Esta vivienda en su época fue la única que contaba con una pileta central que data del año 1650 y fue mandada a construir por Alderete Maldonado y funcionaba gracias a un canal que transportaba agua desde San Blas.

Asimismo, tras la muerte de este almirante otros propietarios más pasaron por esta importante vivienda colonial hasta que se convirtió en el albergue del Museo Inka.

Ya en el segundo piso lo primero que está a la vista es la maqueta del Puente de Q´eswachaca, para luego pasar a la sala donde se exponen los pisos ecológicos que caracterizan a la región cusqueña.

Las salas contiguas están dedicadas a mostrar la historia paso a paso de los incas, al respecto el director del Museo Inka, Danilo Pallardel Moscoso, explicó que en este lugar se puede encontrar cerámica, textilería e incluso herramientas y armas de piedra que han sido elaboradas por los incas.

Además, en una de las salas de este recinto se pueden apreciar paneles con el reconocimiento de las constelaciones, lo que haría suponer que los incas habrían tenido un gran conocimiento sobre astronomía. Al respecto, Pallardel Moscoso, explicó que a pesar de que los incas no tenían telescopios, conocían la vía láctea la cual era denominada “Catachillay”.

Cabe señalar, que antes de finalizar el recorrido histórico de este museo, se encuentra un sala dedicada a las costumbres ancestrales que aun se viven en esta época, como el pago a la tierra, por lo que se muestran los objetos que se utilizan en este tradicional ritual.

Es de esta forma, que tanto niños, jóvenes, así como adultos pueden tener la oportunidad de conocer un poco mas sobre la historia cusqueña a través de los objetos que se exponen en las salas de los museos.