Agente de DINI obtuvo ficha de Marisol Espinoza antes de seguirla

El 22 de octubre de 2014, el jefe del Módulo de Inteligencia Operativa (Modinope), comandante PNP Johnny Javier Bravo Sánchez, buscó dos veces la ficha del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) de la vicepresidenta Marisol Espinoza Cruz.

Bravo Sánchez utilizó el código que le fue asignado por la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM): PCM159.

Bravo Sánchez también obtuvo las fichas de identidad de los hermanos de la vicepresidenta de la República y de sus familiares más cercanos, según arroja una búsqueda en la base de datos del Reniec obtenida por este diario.

Posteriormente, el 31 de octubre de 2014, a las 10 y 56 de la mañana, Bravo volvió a rastrear en el Reniec a la vicepresidenta. Esto confirma que la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) montó una operación de observación, vigilancia y seguimiento a la política piurana.

ANTECEDENTES. Apenas días después, el 3 de noviembre de 2014, la escolta policial de la vicepresidenta intervino a un automóvil sospechoso estacionado a pocos metros de su residencia, en Surco.

Dentro del vehículo se encontraban los suboficiales del Ejército Raúl Pianto y Johnny Huamán, ambos agentes operativos de la DINI bajo el mando del comandante Bravo Sánchez.

La escolta de Espinoza condujo a los espías rumbo a la comisaría de Monterrico. En el camino, el agente Huamán bajó del auto y escapó.

Poco después, el propio comandante Bravo Sánchez se hizo presente en la comisaría de Monterrico e intercedió por la liberación del agente Pianto.

De acuerdo con el parte policial del hecho, Bravo alegó que sus agentes estaban realizando “labores de inteligencia” para garantizar la seguridad de la Embajada de Estados Unidos ante un presunto atentado libanés. Nada más falso.

EL MONTAJE. Lo extraordinario es que la DINI inventó un “plan operativo” para justificar la presencia de sus espías cerca de la casa de la vicepresidenta. Dicho documento fue entregado a la Comisión de Inteligencia del Congreso, que lo dio como verdadero y descartó el reglaje a Espinoza.

El propio exjefe de la DINI y compañero de promoción del presidente Ollanta Humala, capitán EP (r) Javier Briceño, se presentó ante la Comisión Permanente del Congreso y aseguró que la presencia de sus agentes en los exteriores del condominio donde reside Espinoza respondía “a una estrategia ante posibles atentados advertidos por la CIA y el Mossad, las agencias de inteligencia de Estados Unidos e Israel, respectivamente”.

Fruto de esta “alerta”, según Briceño, se produjo la captura de Muhamad Amadar, integrante del grupo Hezbollah, en el distrito de Surquillo.

La falsa operación a la que aludió Briceño fue titulada “Plan Islámico 2014”, que tomó en cuenta, según el exdirector de la DINI, los puntos que podrían ser objeto de atentados, y así se definieron las rutas que serían monitoreadas por el servicio de inteligencia.

Briceño no explicó por qué estas presuntas rutas incluían el condominio donde vive la vicepresidenta, más aún si este se encuentra alejado de la Embajada de Estados Unidos. Pero el Gobierno y los congresistas oficialistas de la Comisión de Inteligencia avalaron el montaje.

EL INICIO. El primer rastreo en el Reniec a la vicepresidenta Marisol Espinoza Cruz, miembro el partido oficialista, fue el 27 de enero de 2011, durante la etapa final del segundo gobierno de Alan García.

En ese momento, el jefe de la DINI era el general PNP (r) Danilo Guevara.

El agente que la rastreó fue Sabino Mario González Sánchez. Utilizó el código de la Presidencia del Consejo de Ministros PCM038.

Posteriormente, el 27 de enero del mismo año, otro agente de la DINI obtuvo la ficha de identidad de la vicepresidenta Espinoza con el código PCM039.

Ya durante el gobierno de Ollanta Humala, el 21 de noviembre de 2011, otro espía del servicio de inteligencia dedicó toda una mañana a buscar a Espinoza, sus hermanos y a sus parientes piuranos en la base del Reniec.

La también parlamentaria ya se presentó ante la Comisión de Inteligencia, que preside el oficialista César Yrupailla, para brindar mayores datos sobre el seguimiento del que fue víctima por parte de agentes de la DINI.

TESIS. “Ha quedado desbaratada la tesis del Gobierno de que esto podría ser de fuentes externas (agencias privadas de espionaje)”, declaró la congresista Luz Salgado.

ESPÍAS SIGUEN ACTIVOS

Dos meses después de que la expremier Ana Jara anunciara la destitución de la plana mayor de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), los agentes encargados de la planificación y ejecución de los operativos de observación, vigilancia y seguimiento a políticos de oposición y del oficialismo continúan en sus puestos como si nada hubiese ocurrido, según la revista Correo Semanal.

Entre ellos figura José Antonio Ramos Madrid, actual N° 2 de la Dirección de Inteligencia, quien también utilizó un código de la PCM para rastrear en el Reniec a las personas que visitaron al expremier aprista Jorge del Castillo en sus oficinas de Magdalena entre el 28 de marzo y el 24 de abril de 2014.

Otros agentes de la DINI que participaron en estas operaciones y que continúan en sus puestos son el técnico en operaciones de inteligencia Héctor Vera Rebollar, el analista de inteligencia Javier Falen Sánchez, Andrés Quintanilla Verástegui, el rastreador Rodorico Cubas Hurtado, entre otros.