El Congreso de la República verá este jueves 4 de noviembre el voto de confianza solicitado por el Gabinete Ministerial presidido por Mirtha Vásquez. (Foto: Archivo GEC)
El Congreso de la República verá este jueves 4 de noviembre el voto de confianza solicitado por el Gabinete Ministerial presidido por Mirtha Vásquez. (Foto: Archivo GEC)

La presidenta de la Comisión de Constitución del Congreso de la República, Patricia Juárez (Fuerza Popular), presentó un proyecto de ley que plantea eliminar la figura del voto de confianza del primer ministro.

Según la , presentada este miércoles 3 de noviembre, se propone modificar el artículo 130 de la Constitución Política, que quedará redactado en los siguientes términos:

“Artículo 130.- Dentro de los treinta días de haber asumido sus funciones, el Presidente del Consejo concurre al Congreso, en compañía de los demás ministros, para exponer y debatir la política general del gobierno y las principales medidas que requiere su gestión. La exposición no da lugar a voto de confianza por parte del Congreso”.

En la exposición de motivos se señala que la experiencia ha demostrado que el voto de confianza a los nuevos gabinetes no ha cumplido con la intención del Congreso Constituyente de 1993, que era “construir acuerdos” entre el Ejecutivo y el Legislativo.

“El voto de confianza a los nuevos gabinetes no tiene sentido en la forma de gobierno peruana -presidencialismo atenuado- debido a que compromete al Congreso de la República a pronunciarse o a legitimar un gabinete en el cual no ha participado en su conformación”, señala el documento.

Así, precisa que de aprobarse el proyecto de reforma, el nuevo Consejo de Ministros se presentará ante el Congreso para exponer y debatir la política general de gobierno sin necesidad de requerir un pronunciamiento por parte de la representación nacional.

“Del mismo modo, se evitará una situación de conflicto entre los poderes del Estado, pues el Congreso de la República no se verá obligado a aprobar un gabinete en el cual no ha participado o para el cual no ha sido consultado”, manifestó.

“Esta situación también permitirá una mejor evaluación y discusión de la política general de gobierno, pues, al no tener una ‘espada de Damocles’ sobre sí, el Parlamento podrá discutir, con mayor solvencia, la política general propuesta”, añade.