Durante una sesión plenaria sobre seguridad ciudadana en el Congreso, el legislador Edwin Martínez Talavera (no agrupado) generó controversia al referirse a la presencia de extranjeros en situación irregular en el país y su vinculación con actividades delictivas.
El debate se desarrolló en paralelo a las protestas de transportistas que exigen mayores acciones contra la inseguridad.
En su intervención, Martínez solicitó al Ejecutivo la deportación de migrantes irregulares, argumentando que “la ilegalidad es delincuencia”.
Además, realizó un comentario que ha sido interpretado como una incitación a la violencia entre criminales: “Ojalá que nuestros malditos asesinen a esos malditos y no los dejen seguir asesinando al pueblo”.
El congresista arequipeño no es ajeno a la polémica. Anteriormente, fue vinculado al grupo conocido como ‘Los Niños’ durante el gobierno de Pedro Castillo.
También fue cuestionado por contratar a Isabel Cajo Salvador, una de las personas señaladas en una presunta red de prostitución dentro del Parlamento, caso que salió a la luz tras el asesinato de Andrea Vidal.
Asimismo, la Comisión de Ética del Congreso investigó a Martínez por sus declaraciones sobre un caso de abuso sexual, en las que sugirió que la víctima “debió controlarse un poco” porque “en borrachera se pierde la ecuanimidad”.
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