El congresista José Jerí Oré, electo como nuevo presidente del Congreso de la República, denunció públicamente que los cuestionamientos que enfrenta —incluyendo presuntos actos de corrupción y una investigación fiscal por violación sexual— serían parte de una campaña política para impedir su llegada a la Mesa Directiva.
“Me voy a someter a todas las investigaciones, pero rechazo categóricamente lo que se me imputa. Esto forma parte de maniobras con intereses en presidir o querer apoderarse de la Mesa Directiva del Congreso”, expresó Jerí ante los medios tras su elección.
El dominical Panorama había adelantado un reportaje donde se lo vincula con presuntos pagos por obras cuando presidió la Comisión de Presupuesto (2023-2024), señalando a una empresaria como testigo. El flamante titular del Legislativo afirmó no conocer a la denunciante y cuestionó que la información se hiciera pública en la víspera del proceso electoral interno.
Además, Jerí se refirió a la investigación que afronta por presunta violación sexual, asegurando que “tengo la conciencia plenamente tranquila” y que ya cuenta con elementos que —según dijo— lo exonerarían, aunque no puede mostrarlos debido a la reserva del caso.
Aseguró que durante su gestión no permitirá que ministros o altos funcionarios eludan las citaciones del Congreso. También anunció una revisión profunda del personal y procesos del Parlamento: “Este es el último año del Congreso unicameral, y tenemos que hacer los cambios necesarios para recuperar la confianza de la ciudadanía”.
