El ministro de Cultura, Fabricio Valencia, señaló que no dispone de datos concretos que confirmen daños a la zona arqueológica de Nasca, pese a que una investigación periodística mostró el ingreso de maquinaria pesada y relaves en el área durante los días en que se redujo temporalmente el polígono protegido.
Durante la entrevista con la prensa, el ministro minimizó la presencia de huellas de vehículos y consideró que no es extraño encontrar actividad humana en el santuario arqueológico, que abarca más de 5,600 kilómetros cuadrados.
El reportaje de Cuarto Poder registró caminos clandestinos, basura y acumulación de minerales sin control cerca de los geoglifos. Mientras tanto, la viceministra de Patrimonio Cultural informó de operativos con decomisos y detenciones, aunque reconoció que las acciones no son suficientes frente al avance de la minería ilegal.
El alcalde de Nasca negó haberse beneficiado del recorte del área protegida y se mostró a favor de una mesa de diálogo.