Nueva Ley universitaria desata polémica
Nueva Ley universitaria desata polémica

La Comisión de Educación del Congreso logró aprobar el proyecto de la nueva Ley Universitaria, en medio de los cuestionamientos de la oposición y el rotundo rechazó de la Asamblea Nacional de Rectores (ANR).

Sin duda, el tema más polémico del dictamen es la creación de la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (Suneu), que según el artículo 12 de la norma, es un "organismo técnico especializado, adscrito al Ministerio de Educación, que tendrá a su cargo normar, regular y coordinar la educación universitaria".

Este organismo, además, "supervisa la calidad de la educación y fiscaliza el uso de los recursos de las universidades", y "autoriza el funcionamiento de las universidades públicas y privadas", de acuerdo a lo estipulado.

¿Y la autonomía?.Al respecto, el presidente de la ANR, Orlando Velásquez Benites, sostuvo que el dictamen en mención es inconstitucional, pues vulnera la autonomía universitaria, que es uno de los principios universales de la enseñanza superior.

"La Superintendencia que se pretende crear mediante esta ley no se ajusta a los mandatos de la Constitución, tanto en lo que respecta a su constitución, funciones y atribuciones", dijo.

Velásquez Benites acusó al presidente de la Comisión de Educación, Daniel Mora, de aprobar el dictamen sobre la base de mentiras y engañados, de una forma grosera y burda.

"Los maestros sí estamos de acuerdo con una ley universitaria, pero queremos que se escuche a todos; no se ha escuchado absolutamente a nadie. Lo que reclamamos es que se discuta a fondo el tema. Nosotros sí queremos la calidad y estamos trabajando para ello. El general Mora simplemente ha hecho oídos sordos y ha mentido e insultado. La manera como lo ha hecho es el colmo del abuso y la prepotencia", manifestó.

Defiende norma. Tras la aprobación del dictamen, Mora ofreció una conferencia de prensa en la que aseguró que el proyecto es constitucional y no atenta contra la autonomía universitaria.

"La autonomía económico- financiera, la autonomía administrativa y la autonomía académica la siguen teniendo", aseguró.

En ese sentido, explicó que las universidades podrán seguir nombrando a los profesores que deseen de acuerdo a ley y pueden sustentar nuevos programas. "Académicamente, pueden hacer lo que quieran", precisó.

Asimismo, aclaró que la Superintendencia se dedicará fundamentalmente a controlar la calidad universitaria de acuerdo a estándares internacionales.

"Por ejemplo, una facultad debe tener determinado número de doctores o magísteres, no puede ser que no tenga una buena biblioteca o adecuados laboratorios", apuntó.

Mora señaló que el Tribunal Constitucional, en una sentencia del año 2010, determinó la desaparición del Consejo Nacional para la Autorización de Funcionamiento de Universidades (Conafu) "y dispone la creación de una Superintendencia que puede evaluar a todas las universidades".

Es más, recordó que el Decreto Legislativo 882 señala que el Ministerio de Educación debe supervisar y regular la calidad educativa de todas las instituciones educativas del país.

"Al caballazo". El congresista del PPC Alberto Beingolea denunció que la norma fue aprobada "al caballazo", trayendo de manera desesperada a los congresistas nacionalistas a la comisión. "Faltaban los votos, trajeron a los accesitarios, y cuando vieron que tenían todo asegurado, la aprobaron", expresó.

Y así fue. A pesar de que la comisión está compuesta por 19 miembros, el dictamen fue aprobado por solo ocho votos a favor (siete de los nacionalistas y Daniel Mora) y dos en contra (Beingolea y Yonhy Lescano).

Los accesitarios a los que se refiere Beingolea son los legisladores nacionalistas Sergio Tejada y Gladys Oseda, quienes llegaron para votar.

"Yo pedí antes de votar el dictamen, que nos den una semana para leerlo, porque es una ley de 140 artículos. Pero como tenían los ocho votitos, no accedieron. Es una vergüenza; una ley como esta no se puede aprobar de esta manera", subrayó.

Por su parte, el legislador de Fuerza Popular Julio Rosas cuestionó que se haya recurrido a los accesitarios para aprobar la norma, pues no han estado presentes durante todos los meses en los que se ha debatido el tema.

"Vienen, votan y se retiran. Esa no es la manera de trabajar una ley de gran alcance", manifestó.

Además, consideró que el proyecto de ley ha violado el debido proceso y "todo principio democrático", pues no se ha escuchado a todas las partes ni ha dejado participar y sustentar a congresistas que han formado parte de la Comisión de Educación.

Apoyo. En otro momento, Luis Thais, secretario general de Perú Posible, partido al que pertenece Daniel Mora, celebró vía Twitter la aprobación del polémico dictamen en la comisión. Para él, por fin la ciudadanía tiene una norma que permite luchar contra el oportunismo político y el poder del dinero de las malas universidades. "Mejor educación para todos. Intereses personales tienen malos rectores y dueños de universidades bambas, con (Alan) García y (Alberto) Fujimori apoyándoles. Padres, protesten", sentenció.

Cuestionamientos. A juicio de la legisladora fujimorista Cecilia Chacón, este dictamen tiene muchos cuestionamientos, y solo es apoyado por el partido de gobierno y sus aliados.

"Es una ley que va en contra de la autonomía de las universidades, porque si bien es cierto tiene que haber un control sobre ellas, estas deben manejarse con libertad, no las podemos coaccionar", manifestó. Advirtió además que con esta norma las universidades estarán en adelante adscritas al Ministerio de Educación, lo cual es peligroso.