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Aunque la semana pasada anunció que viajaría a Áncash para poner orden en el gobierno regional, esta vez el presidente se mostró más conciliador. 

En declaraciones a la prensa desde Puno, el mandatario anunció que no hay tiempo para enfrentarse con las autoridades regionales y anunció que trabajará en conjunto con ellos.

"Necesito el apoyo de los gobiernos regionales y locales para trabajar juntos sin pelearnos, también aquí en Puno y otras regiones...aquí vamos a apoyar al presidente regional con obras", anotó.

Ollanta Humala dijo que en el caso de Punto, cuando asumió el gobierno no había una correcta política energética, pero esta vez ya existen desde subsidios hasta beneficios en el precio del gas.

"Tenemos medio millón de familias con un subsidio y descuentos, vamos a recuperar el lote 88 para el país lo que nos permite tener la demanda y oferta para el gasoducto", dijo el mandatario.

Agregó que Puno tendrá su ramal de gas, pero que el siguiente reto es ampliar las conexiones de gas doméstico. No obstante insistió: "Me ratifico en que no le voy a dar ni un centavo para estatuas o monumentos", finalizó Ollanta Humala.