El pasado 18 de noviembre, el servicio de permanencia de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote) de la Policía Nacional logró detener, en el distrito de Independencia, a Esteban Pascual Llata Sarmiento (54), quien se encontraba distribuyendo volantes del Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), sindicada como la fachada legal de Sendero Luminoso (SL).
El citado personaje tenía en su poder una cartulina con el mensaje: “¡Por nuestro derecho a la organización y a la participación política!”, así como 120 volantes con frases: “¡Abajo el plan de encarcelar al Movadef!”, “Libertad para el doctor Guzmán”, entre otros vinculados al grupo prosenderista.
Llata Sarmiento es un excarcelado terrorista, que fue capturado cuando realizaba pintas alusivas a un paro armado, junto con integrantes de la organización terrorista Sendero Luminoso, en la avenida Colonial (Cercado de Lima) en 1990.
Según fuentes de la propia Fiscalía Antiterrorismo, el presunto senderista es identificado por inteligencia de la Policía como un integrante del Frente de Defensa de los Intereses del Pueblo de Lima Norte (Fredip-LN), así como del Movadef.
Incluso, reportes de inteligencia lo han captado realizando coordinaciones constantes con otros excarcelados por delito de terrorismo; entre ellos se encuentran: Nohemí Ángeles Moreno, Willy Severo Manrique Marcelo y Rosalvina Rivera Egas.
EN LIBERTAD
Pese a estos antecedentes, el fiscal adjunto de la Primera Fiscalía Supraprovincial Especializada en Delitos de Terrorismo Jesús Pasión Hermosa determinó que sea liberado.Esta medida no cayó nada bien al procurador antiterrorista Milko Ruiz, quien informó al fiscal de la captura policial días después, el 21 de noviembre.
“Los panfletos fueron remitidos a la División de Análisis de la Dircote para determinar si contienen términos que constituyan delito de apología al terrorismo, pero el fiscal decidió liberarlo apresuradamente cuando la investigación aún estaba en curso”, sostuvo una fuente de la Procuraduría.
Cabe recordar que, en junio de este año, el Congreso aprobó el dictamen para tipificar el delito de apología del terrorismo. De esa manera, se establecen sanciones con penas de hasta 15 años de cárcel.
Al respecto, el congresista Octavio Salazar (FP) lamentó la actuación de la Fiscalía y señaló que el capturado debería terminar en prisión. “Por ese acto, merece la cárcel; existe una ley de apología al terrorismo para evitar estos actos”, sostuvo. En esa línea, pidió a la Procuraduría que tome acciones para que el caso no se caiga.