Tomás Gálvez intento reunirse con Delia Espinoza esta semana. (Foto: Julio Reaño/@photo.gec)
Tomás Gálvez intento reunirse con Delia Espinoza esta semana. (Foto: Julio Reaño/@photo.gec)

Las pugnas al interior de la Fiscalía de la Nación cobran fuerza y se hacen cada vez más notorias. La titular de la entidad, Delia Espinoza, instó a su colega y fiscal supremo Tomás Gálvez a “denunciar” el presunto reglaje del que sería víctima y que este evidenció, un día antes, en un programa de televisión.

“Imagino que presentará su denuncia (...). No puedo responder (sobre) lo que está en la cabecita del doctor” aseveró Espinoza durante una conferencia de prensa.

La respuesta de Gálvez Villegas, en tanto, no tardó en llegar. Correo recogió su versión sobre unos aparentes videos suyos que estarían en poder de la Fiscalía.

Frente a frente

“Sería bueno que él describa en qué consiste (dicho reglaje)”, comentó la fiscal de la Nación, en horas de la mañana de ayer, en una rueda de preguntas con los medios de comunicación. La convocatoria abordó los resultados del Ministerio Público (MP) en la lucha contra la violencia de género. Sin embargo, Espinoza fue consultada sobre otros temas coyunturales.

“No sabía de esto (sobre las declaraciones de Gálvez). No hemos recibido ningún documento (...). Simplemente, lo que yo recomendaría, es que presente su denuncia. Es grave. Y que señale quién le estaría haciendo daño”, insistió sobre las quejas del titular de la Fiscalía Suprema de Familia.

Los explosivos comentarios del fiscal supremo tuvieron lugar en el programa Milagros Leiva, entrevista (Willax TV).

Allí, afirmó que “ha trabajado como director del Centro de Asuntos Interculturales, Comunidades y Rondas Campesinas del MP y que, en dicha condición, ha trabajado” con dichos grupos a nivel nacional.

“Lo hice incluso estando fuera del MP. Ahora que estoy allí, me invitan de diversas organizaciones. Pero ponen en conocimiento de la Fiscalía de la Nación y me invitan a mí. Nunca me autorizan, dicen que yo no soy representante (del organismo). (...) Me están haciendo seguimiento. Si yo me reúno con una persona, a donde vaya, me persiguen, me filman y esas filmaciones están en la Fiscalía de la Nación. Me quieren armar un ‘muñeco’”, aseguró Gálvez.

En esa línea, acotó que la “estrategia” es presentar una denuncia anónima y luego solicitar las grabaciones a ciertos locales o “los lugares donde ha concurrido”.

Ayer, en diálogo con Correo, el funcionario ratificó lo antes señalado. Agregó que tiene conocimiento de ello debido a que, “en el mismo despacho de la Fiscalía de la Nación, hay gente que no está de acuerdo con lo que ella (Espinoza) está haciendo” en su contra.

“Esa gente me ha comunicado que tienen filmaciones sobre mí en la Fiscalía y que están trabajando de eso”, señaló.

De acuerdo a su testimonio, la alta funcionaria lo considera “un peligro” para el MP.

“A mí me conoce la gente (personal de la Fiscalía) más que a ella y me tienen más confianza.Cualquier cosa que ella está haciendo, creyendo que lo hace en secreto, me pasan la voz”, indicó.

En otro momento, sobre la invitación de su superior a denunciar el presunto hostigamiento, redobló la apuesta y la exhortó a entregarle el aparente material fílmico que tiene sobre él: “Que me alcance los videos que tiene ahí en su despacho, con eso presento (la denuncia), sino cómo”.

“Una vez que consiga los videos y que sepa cómo lo han obtenido, y por orden de quién, obviamente tengo que denunciar a las personas que han hecho ese trabajo, ya sean los autores directos, indirectos o mediatos (...). Todavía está muy incipiente la situación”, comentó.

En esa línea, no descartó acudir a la Junta Nacional de Justicia (JNJ) u otro organismo de llegar a tener los “videos” mencionados.

Historial

Las asperezas entre ambos funcionarios empezaron a forjarse en abril de este año, luego que el Tribunal Constitucional (TC) anulara la destitución de Gálvez como fiscal supremo y ordenara su reincorporación en el cargo.

La entidad concluyó que fue apartado de su puesto sin un debido proceso. El TC indicó que la Junta Nacional de Justicia (JNJ) le aplicó un “procedimiento disciplinario inmediato”, en abril del 2021, que “lesionó” su derecho a una legítima defensa.

Además, destacó que la” determinación de la intensidad de la sanción no tuvo como objeto adecuarse a la gravedad de la infracción y a la responsabilidad personal del actor, sino que tuvo como fin la satisfacción de fines impersonales, como el fortalecimiento de la confianza ciudadana en el sistema de justicia”.

La institución, vale precisar, no lo eximió de las imputaciones en su contra: su presunta solicitud al exjuez supremo César Hinostroza “para que ayude a un sentenciado por tenencia ilegal de armas”; y otra para que apoye “a una de las partes, el fiscal Javier Delgado, en un proceso en trámite en un juzgado de familia”.

El TC ordenó su restitución retrotrayendo todo lo avanzado en la JNJ, dejando vía libre para que se inicie un procedimiento disciplinario conforme a la normativa vigente.

Lo siguiente en esta disputa fue la inminencia del regreso de Gálvez a sus funciones en un contexto en el que había sido anunciado como precandidato a la Presidencia de la República por el partido que ayudó a fundar, Peruanos Unidos ¡Somos Libres!, hoy en carrera electoral.

En esa marcha, Espinoza formuló un recurso para que este sea “suspendido en el cargo”.

En la audiencia, del 29 de mayo último, el juez supremo Juan Carlos Checkley escuchó como alegato principal, por parte de la Fiscalía, la alusión a una investigación a Gálvez Villegas por presunta organización criminal y otros.

Sin embargo, descartó el pedido al considerar que el caso se encontraba fuera de los alcances del MP, pues ya había formulado una denuncia constitucional ante el Congreso —eventualmente archivada— para formalizar la investigación.

El permiso era requerido debido a la investidura que ostentó Gálvez, quien finalmente se reincorporó en la JFS el 20 de junio.