Adultos mayores que tienen de compañía una mascota son más saludables, según estudio
Adultos mayores que tienen de compañía una mascota son más saludables, según estudio

¿Quién no ha tenido una mascota de pequeño o incluso en su adultez? Todos los seres humanos siempre hemos experimentado la  en diferentes etapas de nuestra vida, ellos nos han hecho compañía y a pesar de no poder hablar su cariño ha sido fortaleza y ha roto barreras de soledad que muchos viven.

Pero qué pasa cuando uno va envejeciendo y muchos hijos dejan el "nido del hogar" para formar sus propias familias, pues una mascota puede ser la solución para acabar con el vacío que puede dejar la partida de un ser querido o quedarse solo en una casa tan grande.

Según un reciente estudio, tener mascotas trae muchos beneficios para la salud, sobretodo para los , quienes tienden a pasar mucho tiempo en soledad.

Los recientes resultados de la Encuesta Nacional de Envejecimiento Saludable de la Universidad de Michigan (Estados Unidos), la cual contó con la participación de más de dos mil personas entre los 50 y 80 años, reveló que más te la mitad (55% de hombres y mujeres encuestados) tiene una mascota.

Entre las mascotas más populares se encuentran los perros y gatos; y luego otros animales como pájaros o hámsters. Según los resultados, las razones más frecuentes por la que los  tienen una mascota es por la compañía (52%) mientras que el 21% indicó que es por que encontraron al animal en la calle y decidieron adoptarlo.

Al ser consultados sobre que beneficios les ha traído tener una mascota, indicaron que les permite gozar la vida y sentirse amados (88%). De igual forma, el 80% sostuvo que les baja el nivel de estrés y mejora su presión arterial.

Asimismo, 73% indicó que tener una mascota le da sentido a su vida, mientras un 63% señaló que les ayuda a tener una rutina.

Sin embargo, tener una mascota no asegura en un 100% el bienestar para un  ya que según el mismo estudio, un 42% de los encuestados señaló que si bien les gustaría tener una mascota, no desean estar atados debido a que no podrían viajar ni dejar la casa. Otro 23% dijo que por falta de dinero no podrían tener uno, el 20% que les faltaba tiempo para cuidarlo y 16% que eran alérgicos a perros y gatos, mientras que otros por falta de espacio en su hogar.