Ejercicio regular, control de peso y adaptación del hogar son claves para enfrentar esta enfermedad degenerativa.
Ejercicio regular, control de peso y adaptación del hogar son claves para enfrentar esta enfermedad degenerativa.

La artrosis, enfermedad degenerativa que afecta las articulaciones causando dolor, rigidez y pérdida de movilidad, puede complicarse con el frío y limitar la calidad de vida de quienes la padecen. Si bien no tiene cura, existen estrategias efectivas para prevenir la frecuencia e intensidad de las crisis de dolor.

El Dr. Oscar Chigne, reumatólogo de la Clínica Ricardo Palma, comparte cinco recomendaciones esenciales para ayudar a las personas con artrosis a enfrentar la temporada de bajas temperaturas y mantener su bienestar físico y emocional:

  1. Ejercicio regular y evitar el sedentarismo: Actividades de bajo impacto como caminar en terreno plano, nadar, ciclismo o terapia acuática ayudan a fortalecer músculos y mejorar la movilidad. Contar con un fisioterapeuta es clave para una rutina segura y efectiva.
  2. Control del peso y prevención de la obesidad: El exceso de peso incrementa la carga sobre las articulaciones y favorece la inflamación sistémica crónica, agravando el dolor. Perder entre un 5% y 10% del peso corporal, mantener una dieta saludable y realizar ejercicios de fortalecimiento pueden reducir el dolor hasta en un 50%.
  3. Equilibrio entre actividad y descanso: Evitar la inactividad prolongada y realizar cambios de posición durante el día ayuda a prevenir la rigidez y atrofia muscular. Asimismo, mantener un horario de sueño regular contribuye a reducir la percepción de dolor crónico.
  4. Adaptar el hogar y las actividades diarias: El uso de mobiliario ergonómico, eliminación de obstáculos, instalación de barras de apoyo y utensilios con mangos anchos en la cocina ayudan a reducir la tensión articular, mejorar la seguridad y mantener la independencia funcional en las actividades cotidianas.
  5. Buscar apoyo emocional y compartir experiencias: Participar en grupos de apoyo presenciales o virtuales permite afrontar mejor el dolor crónico, compartir estrategias de manejo de la enfermedad y fomentar una actitud positiva.

“El dolor no solo es físico, también afecta emocionalmente. Con apoyo, adaptación del entorno y hábitos saludables, es posible mantener una buena calidad de vida”, subraya el Dr. Chigne.

La artrosis no tiene por qué frenar el bienestar. Con un enfoque integral que incluya actividad física adecuada, control de peso, adaptaciones en casa y apoyo emocional, las personas pueden enfrentar el invierno de forma más segura, activa y con menos dolor.