El sedentarismo prolongado en el trabajo puede causar dolores, fatiga, mala circulación y hasta enfermedades cardiovasculares. Una fisioterapeuta recomienda pausas activas y pequeños ejercicios para cuidar tu salud sin salir de la oficina.
El sedentarismo prolongado en el trabajo puede causar dolores, fatiga, mala circulación y hasta enfermedades cardiovasculares. Una fisioterapeuta recomienda pausas activas y pequeños ejercicios para cuidar tu salud sin salir de la oficina.

Pasar largas jornadas frente a la computadora puede parecer inofensivo, pero tiene un impacto directo en la salud física y mental. Dolores de espalda, rigidez muscular, fatiga, mala circulación y riesgo cardiovascular son solo algunas de las consecuencias de un estilo de vida sedentario en el entorno laboral.

“Estar más de seis horas al día sentado, sin realizar pausas, afecta el cuerpo y la mente. Puede generar rigidez, cansancio, mala circulación, aumento de peso e incluso enfermedades cardiovasculares”, explica Violeta Suclupe, docente de fisioterapia y rehabilitación del Instituto Carrión.

Para contrarrestar estos efectos, la especialista recomienda implementar pausas activas durante la jornada laboral, incluso en espacios reducidos y sin necesidad de equipos especiales. Aquí algunos consejos prácticos:

  • Activa recordatorios para moverte cada hora: basta con dos minutos para estirarte o dar una pequeña caminata.
  • Aprovecha los tiempos muertos: mientras esperas una llamada o entre tareas, muévete o cambia de posición.
  • Ejercítate desde tu silla: rota el cuello, mueve los hombros, levanta los talones.
  • Coloca tu botella de agua lejos: así te verás obligado a levantarte y mantenerte hidratado.
  • Adecúa tu espacio de trabajo: una buena postura evita dolores innecesarios y mejora tu movilidad.

Rutina exprés para activar tu cuerpo en la oficina

  • Gira la cabeza suavemente hacia ambos lados, como si dijeras “sí” y “no” (10 repeticiones).
  • Sube y baja los hombros mientras exhalas (10 veces).
  • Estira los brazos hacia el techo y mantén la postura por 15 segundos.
  • Extiende una pierna con la punta del pie hacia ti durante 10 segundos, luego cambia.
  • Haz círculos con los tobillos, 10 veces por cada lado.

“Recuerda, no se trata de hacer horas de ejercicio, sino de escuchar a tu cuerpo y moverte con conciencia. Las pausas activas te recargan de energía y mejoran tu desempeño laboral”, resalta Suclupe.

Implementar estos pequeños hábitos puede marcar una gran diferencia en tu bienestar a largo plazo.

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