Hace más de 145 años, un pequeño objeto de filamento de carbono revolucionó la vida cotidiana y sigue impulsando los sueños de innovación.
Hace más de 145 años, un pequeño objeto de filamento de carbono revolucionó la vida cotidiana y sigue impulsando los sueños de innovación.

El encendido de la primera bombilla eléctrica funcional, desarrollada por Thomas Alva Edison en 1879, marcó un hito que cambió el curso de la historia. Este invento no solo iluminó hogares y ciudades, sino que también abrió paso a una nueva era de desarrollo, innovación y progreso en todo el mundo.

Aunque el nombre de Edison suele estar vinculado directamente con este avance, numerosos inventores ya habían intentado crear una fuente de luz eléctrica antes que él. Sin embargo, Edison logró perfeccionar el diseño con un filamento de carbono dentro de un bulbo al vacío, logrando que la bombilla permaneciera encendida durante más de 40 horas.

La llegada de la bombilla eléctrica transformó radicalmente la vida cotidiana:

  • Mayor seguridad: Reemplazó a las velas y lámparas de aceite, reduciendo el riesgo de incendios.
  • Ampliación de actividades nocturnas: Facilitó el estudio, el trabajo y el ocio más allá de la puesta de sol.
  • Dinamización urbana: La iluminación pública potenció el crecimiento económico y social en las ciudades.

Actualmente, la tecnología ha evolucionado hacia soluciones más eficientes como las luces LED, pero el principio básico —transformar energía en luz— sigue iluminando el camino de la humanidad.

Inspiración para el futuro: “Soñadores que transforman”

Siguiendo el legado de visionarios como Edison, Colbún y Fenix lanzaron la campaña “Soñadores que transforman”, un homenaje a los grandes científicos e inventores que cambiaron el mundo. Esta iniciativa busca recordar que el espíritu de innovación y perseverancia sigue siendo clave para enfrentar desafíos como la transición energética y el impulso hacia un futuro más sostenible.

“Tenemos que seguir soñando para transformar”, afirmó José Ignacio Escobar, CEO de Colbún, destacando la importancia de la innovación en la industria energética.

Así como la bombilla iluminó el mundo hace más de un siglo, las nuevas generaciones están llamadas a encender sus propios sueños, impulsando el cambio y la construcción de un futuro mejor.