Pisco: peregrinan y conmemoran 206 años del nacimiento de la “Beatita de Humay”

Actualizado el 22/06/2025, 11:00 a.m.

La Beatita de Humay cumple 206 años de su nacimiento y cientos de feligreses acuden caminando a la iglesia San Pedro Apóstol del denominado distrito santo de Humay. El 21 de junio de 1819 nació Luisa de la Torre Rojas “La Beatita de Humay” y su hermana melliza Carmen de la Torre Rojas.

Historia de la beatita

Tienen como tradición los hombres y mujeres de todas las edades acudir a la misma tumba de la beata que está situada al lado derecho del altar de la iglesia, lugar al que ingresan los creyentes para agradecer por los milagros concedidos, otros a pedir por salud, trabajo, entre otros.

A unos metros también está situada aún la casa donde habitaron las mellizas Luisa y Carmen que según la historia quedaron huérfanas y fueron cuidadas por sus tías. Y como era costumbre las mismas viviendas tenían capilla en su interior donde veneraban al niño Jesús y la Virgen de Guadalupe.

Este lugar se convirtió pronto en un sitio de acogida donde llegaban personas por consuelo espiritual, mujeres maltratadas y desamparados. Las hermanas acondicionaron una pequeña escuela donde enseñaban las primeras letras, costura, bordado y otros oficios. Luisa de la Torre se dedicó a curar a todos los que acudían buscando ayuda, utilizaba medicinas naturales y rezaba al niño Jesús. Todos los días llegaban gran cantidad de enfermos de todas partes del Perú.

Narran los libros de historia de milagros como devolver la vista a una niña ciega, dicen que sus medicinas eran efectivas, tenía una ollita de barro milagrosa que multiplicaba la comida a todo quien acuda con fe hacia ellas.

Luisa de la Torre, la “Beatita de Humay” falleció el 21 de noviembre de 1869 a los 50 años a causa de una pulmonía. Su casa fue convertida en lugar de peregrinación.

Pero ella no ha sido la única en recibir honores, pues su hermana Carmen se ha sumado al santuario. Después de casi 80 años de descansar al lado derecho del Altar Mayor del Santuario del Señor de Luren de Ica, los restos de Carmen se expusieron al sol iqueño y se llevaron al templo de Humay en 2018.