El congresista advirtió que las instituciones no han actuado a la altura de la crisis y pidió la salida de los responsables, declaraciones dadas en medio de la alarmante expansión de los incendios forestales que afectan varias regiones del país. Como presidente de la Comisión Especial de Seguimiento a Emergencias y Gestión de Riesgo de Desastres – COVID-19, Raúl Doroteo, junto al congresista Elvis Vergara, realizaron una visita de trabajo in situ para evaluar el impacto de esta catástrofe ambiental en Ucayali, que ha puesto en riesgo la biodiversidad, la salud pública y la estabilidad económica de la región.
Crisis
Durante la inspección, Doroteo hizo un llamado a las autoridades nacionales, subrayando que la situación ha superado la capacidad de respuesta del Estado peruano. “No solo enfrentamos un reto ambiental, sino un desafío de escala global. Hoy, más que nunca, es momento de solicitar intervención y cooperación internacional, tanto en términos de asistencia técnica especializada como de equipamiento de última generación que permita contener y mitigar los efectos devastadores de esta crisis ambiental”, manifestó Doroteo.
En este año, Ucayali ha enfrentado una grave crisis de incendios forestales con más de 132 incidentes registrados. Actualmente, cinco incendios continúan activos, poniendo en riesgo la vida y los recursos de las comunidades locales. Según el Gobierno Regional de Ucayali, 280 familias en Campo Verde y Nueva Requena han sufrido pérdidas significativas y desplazamiento. Además, aproximadamente 15,921 hectáreas de cultivos, incluyendo yuca, plátano y cacao, se han perdido, afectando gravemente la producción agrícola y la seguridad alimentaria.
Doroteo cuestionó la respuesta de las instituciones encargadas, particularmente del Ministerio del Ambiente. “No podemos seguir tolerando que estas entidades sigan hablando de planes y estrategias sin resultados tangibles. La situación ya no permite discursos vacíos ni la falsa calma de que todo está bajo control. Si no están dispuestos a actuar con la urgencia que la crisis demanda, es momento de que den un paso al costado. Nadie puede estar detrás de un escritorio mientras el país arde”, afirmó.
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