Lo argumentaré desde la más pura hermenéutica jurídica que es lo más serio desde la ciencia del derecho en su camino hacia lo justo. Los fundamentos de hecho y de derecho de la denuncia constitucional colisionan con la realidad, la buena fe y el tiempo que son relevantes en los actos jurídicos. La realidad es y no lo que se cree que es, pues así casi siempre se ve todo al revés.

El presidente Castillo jamás dijo siquiera literalmente que tenía la intención de ceder territorio peruano a Bolivia y mucho menos habló de soberanía. Esta realidad es fácilmente comprobable viendo el video de la entrevista en CNN todas las veces que sea necesario y queda confirmado cuando reitera al periodista: “Yo no le estoy diciendo que le voy a dar el mar para Bolivia”. En la denuncia (pág. 2) deliberadamente no se publica la parte enfática de las palabras del presidente: “Esa no es mi intención” porque de manera categórica e indubitable, confirma que el jefe de Estado no tiene la intención -ausencia de comportamiento doloso- de ceder nuestro territorio y aunque es evidente que hubo una manifiesta confusión, jamás una conducta confusa puede ser apreciada como deliberada para imputar un delito.

Al contrario, las respuestas del mandatario confirman su actuación de buena fe y si se quiere hasta pudo en ese marco haber error en las palabras y si así fuera, debo recordar que nunca el error genera derecho, es decir, palabras erradas -que no las fueron sino confusas- no podrían servir de capricho para construir una denuncia marginal al derecho. La ausencia de propósito para maquinar una cesión de territorio quedó una vez más confirmada en una entrevista en el diario La Noticia en que el presidente de manera indubitable -acto de factum y de iure-, dada su condición inseparable de presidente y persona natural, no solo pide disculpas al país porque -dijo- “me expresé mal” sino que añadió “nunca en mi vida podría ceder un centímetro del territorio peruano a otro país”.

Finalmente, por temporalidad ¿Podría una denuncia presentada el 1 de febrero de 2022 tener asidero cuando hubo las necesarias aclaraciones públicas y mea culpa al país, hechas el día anterior?. La denuncia, entonces, se ve forzada y con una pretensión desnaturalizada por la inexistencia de un cuerpo material verbal indispensable que la sostenga.