El Estado a través de los servicios de inteligencia está en la obligación de identificar para que la Policía Nacional con la participación del Ministerio Público, pueda mantener a buen recaudo a quienes por estos días están tratando de incendiar el país con movilizaciones violentas que nada tienen que ver con reclamos pacíficos como los que protege nuestro sistema legal.

La semana pasada ya fue puesta tras las rejas la exreclusa Rocío Leandro, alias “camarada Cusi”, pero sin duda no es la única que ha estado metiendo sus manos sucias en esta coyuntura generada tras el golpe de Estado de Pedro Castillo.

Vinculados a bandas armadas o no, son muchas personas las que deberían estar tras las rejas, pues sus acciones no solo generan tomas de carreteras y ataques a la propiedad pública y privada, sino también la muerte incluso de inocentes.

Estas acciones deberían ser adoptadas desde ya, aún cuando desde sectores de la izquierda cuestionan el trabajo que se hace para evitar más desmanes. Hemos visto a congresistas y a un exministro defendiendo a alias “Cusi”.

Antes que todo está el bienestar y la vida de los peruanos que quieren trabajar y progresar.


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