Lorena Vásquez: "Voy a cumplir 30 años dedicada al ron"

En setiembre del 2014 Lorena Vásquez Ampié cumplirá 30 años dedicada a hacer ron y no cualquier ron. Ella es una de las dos mujeres en el mundo que ostenta el título de blender (maestra destiladora). El trabajo de esta ingeniera química consiste en vigilar todo el proceso de producción y dar el visto bueno a cada una de las botellas de ron Zacapa que salen al mercado. Para ello, cuenta con dos herramientas: su experiencia y su sentido del olfato.

¿Cómo se llega a ser una máster blender?

Es importantísimo tener el conocimiento técnico porque así sabes qué está sucediendo en las etapas del proceso. También necesitas habilidad sensorial porque debes ser capaz de percibir los aromas y sabores para desarrollar el producto; y el tercer elemento es la pasión por lo que haces. Es un mundo muy demandante y debes tener pasión para dedicarle tiempo.

¿Cómo descubrió esa pasión?

Estudié alimentos porque siempre tuve la facilidad de percibir aromas y sabores. Mi mamá me decía que a toda comida le ponía un pero. En la universidad aprendí el análisis sensorial y comencé a entender que tenía una mayor facilidad que otras compañeras. En una clase, que era análisis orgánico, te daban cinco frasquitos para descubrir que productos eran. No podías dar examen final sino entregas un reporte de tus desconocidos. Empecé a olerlos y me di una idea con los aromas y ya sabía qué buscar y eso me economizó un tiempo tremendo en el laboratorio, se volvió como un juego.

Tiene un sentido del olfato privilegiado, ¿cómo lo usa en su labor?

No te lo puedo explicar. La verdad es que me acerco a algo para sentir los aromas y si lo tengo en mi base de datos lo reconozco y si no, te puedo decir que hay algo más que no puedo identificar. Pero cómo hacer la relación matemática de lo que percibo y proceso no sé, es la práctica y la memoria olfativa.

¿Cuál es el olor más interesante que ha recogido en el Perú?

Me gustó el camu camu y el huacatay. Es una referencia que no tenía, el huacatay es una mezcla de otros aromas. Tengo que hacer la parada obligatoria en el supermercado para conseguir más.

Es una de las pocas mujeres que ostenta el título de máster blender. ¿Fue difícil entrar a una industria dominada por hombres?

Las barreras se las pone uno mismo. Yo no sabía que sería la única mujer de las 180 personas que en ese entonces trabajaban en Zacapa y me di cuenta de eso cuando ya estaba adentro. Cuando tuve que hacer mi trabajo nunca pensé si era hombre o mujer, tengo mi carácter y eso me ayudó para ganarme el respeto.

Si no hubiera sido máster blender o química farmacéutica, ¿a qué se hubiera dedicado?

Creo que hubiera sido bailarina. Me gustaba el baile. En esa época peleaba con mi papá. A él no le emocionaba que le dijera que me emocionaba aprender más cosas de baile, pero en la universidad encontré que me encanta la parte sensorial. Me hubiera dedicado a trabajar en la industria del perfume. No me quiero morir sin hacer un perfume.

EL DATO

La experta en este licor es una de las dos mujeres en el mundo que ostentan el título de maestra destiladora.