Humala puede postular al Congreso bicameral, igual que Castillo. En tanto, Vizcarra depende de un fallo de la Corte IDH.
Humala puede postular al Congreso bicameral, igual que Castillo. En tanto, Vizcarra depende de un fallo de la Corte IDH.

Mientras algunos partidos políticos se proyectan a participar en solitario en las elecciones de 2026, y otros buscan formar alianzas, tres actores políticos que tienen impedimento o limitaciones para intervenir en los sufragios apelan a su capacidad de endosar votos para tener protagonismo.

Se trata de Martín Vizcarra, que tiene tres inhabilitaciones para ejercer cargos públicos; Antauro Humala, cuyo partido fue declarado nulo; y Pedro Castillo, quien intentó dar un golpe de Estado en 2022.

Ellos, sin embargo, tendrían una mínima capacidad para endosar sus votos, según el analista político César Campos y el especialista en derecho electoral José Naupari.

En opinión de César Campos, Castillo y Vizcarra “no tienen capacidad de endose”, porque el elector peruano ya no se deja conducir ni mandar, y votan por candidatos de su preferencia.

“Ellos atesoran un porcentaje del electorado, pero no es un voto de arrastre impresionante. Antauro lo tiene más regimentado, con el 3% o 4%, y puede tener la capacidad de endosar votos, pero no Castillo ni Vizcarra”, opinó.

Consideró que las simpatías las tienen muy focalizadas, como Humala en la zonas mineras y parte del sur del país, Castillo en el sur y Cajamarca y Vizcarra en Moquegua, lo que no configuraría un voto decisivo.

Capacidad

Por su parte, José Naupari resaltó que Pedro Castillo y Antauro Humala no tienen impedimento, al día de hoy, para postular al Congreso bicameral. Agregó que si bien Vizcarra está inhabilitado, podría postular si consigue una medida cautelar de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

En estas condiciones, indicó, la capacidad de endose o arrastre de votos dependerá más de factores personales y de acuerdos que puedan alcanzar.

Precisó que solo el exmandatario Vizcarra tendría capacidad de endose, porque tiene el respaldo de un partido, mientras que Castillo y Humala tienen a sus simpatizantes dispersos.