Saber identificar signos que anuncien una salud mental en riesgo es clave para actuar de manera preventiva o pedir ayuda profesional de ser necesario.
Saber identificar signos que anuncien una salud mental en riesgo es clave para actuar de manera preventiva o pedir ayuda profesional de ser necesario.

La salud mental toma cada vez mayor importancia y para lograr un bienestar integral, es importante saber que se debe tomar como prioridad, al igual que la salud física. Sin embargo, según cifras del Ministerio de Salud (MINSA), solo el año pasado de enero a agosto, la fue el problema de salud mental más diagnosticado con un 28.81%, seguido de la depresión con un 17.57% y el síndrome del maltrato con un 15.12%.

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Para el año 2030, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que los problemas de salud mental serán la principal causa de discapacidad en el mundo

“Es fundamental hacer visible los trastornos de salud mental para que la gente los conozca y aprendan a identificar ciertos signos que pueden alertar distintos riesgos. Por ello, la carrera de Psicología de la Universidad Continental pone a disposición de la sociedad el servicio CALMA que, desde hace tres años, viene brindando soporte emocional y apoyo con un enfoque de ayuda humanitaria, de manera no invasiva, orientada a las personas para acceder a servicios y apoyo social, entre otros”, comenta la psicóloga Karen Pérez.

Además, la docente de psicología y directora del servicio, indica cinco señales que pueden dar alerta de una alteración del estado mental y que revelan la necesidad de solicitar o acceder de la ayuda de un especialista.

  1. Sensación continua de cansancio: Una de las señales de que tu salud mental se está deteriorando es la sensación de estar cansado casi la gran parte de tiempo, así como la falta de energía en las actividades del día a día. Si no se cuenta con un motivo conocido para un exceso de fatiga, se puede tratar de una manifestación emocional.
  2. Tener una actitud crítica: La crítica constante suele sumarse a la manía de darle mayor importancia a pequeños detalles o al hecho de que gran parte del tiempo se cuente con una actitud negativa ante los comentarios que podrían venir de otras personas.
  3. Somatización: Se da cuando algunos problemas de salud física suelen asociarse a problemas de salud mental. Por ello, es necesario prestar atención a los dolores de cabeza, dolores musculares y problemas digestivos persistentes que no tienen un origen físico conocido.
  4. Cambiar hábitos alimenticios: Los cambios pueden ser resultado de una alteración mental. Si alguien de su entorno cercano empieza a comer sin sentir saciedad puede estar pasando por hambre emocional, que es un tipo de ansiedad que hace comer, no porque se tenga hambre, sino por problemas personales que no se saben gestionar.
  5. Dificultad para dormir: El insomnio puede ocurrir con frecuencia y una explicación para no conciliar el sueño se debe a los problemas de salud mental como la ansiedad. Los pensamientos intrusivos (pensamientos que se dan de manera involuntaria) y las preocupaciones incontrolables evitan el descanso pleno.

La especialista señala, que una atención primaria puede ser el primero paso para identificar tu problema. En ese sentido, agrega que “las personas que quieran acceder al servicio CALMA pueden solicitarlo a través de una cita a , la atención personalizada está a cargo de voluntarios entre docentes, egresados y estudiantes de los últimos ciclos de psicología de la Universidad Continental, durante 10 horas continuas (de 9:00 a.m. a 7:00 p.m.), de lunes a sábado”.

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