Pareciera que algunos funcionarios del Ministerio de Educación y de la PCM tienen mucho apuro por hacer aprobar el nuevo Reglamento de Organización y Funciones del Minedu, cuando el presidente de la República y el ministro de Educación han expresado que lo urgente es el regreso seguro a las clases presenciales de los escolares, todos los días y en horarios regulares, así como el desarrollo de clases presenciales en la Educación Superior. Por eso, dicho documento debe trabajarse con calma y pertinencia. No obstante, propongo órganos de línea y transversales del Minedu para que haya coherencia con el sistema educativo nacional que debe gestionar de manera descentralizada.
En el Viceministerio de Educación Básica (VEB), teniendo en cuenta que le corresponde gestionar sus modalidades, no deben obviarse tres direcciones generales de línea (las que se pretende inexplicablemente agrupar en una sola “dirección de aprendizajes”). Estas son: Educación Básica Regular, Educación Básica Alternativa y Alfabetización, y Educación Básica Especial e Inclusiva. Debe haber direcciones generales transversales, entre otras: Tutoría y Bienestar Socio Emocional; Educación Rural e Intercultural Bilingüe; Gestión Educativa Descentralizada; Educación Comunitaria y Ambiental; y Desarrollo Docente(para evaluaciones y carrera magisterial)y otros Actores Formativos.
Es inconcebible que en el Viceministerio de Educación Superior se pretenda crear una “Dirección General de Servicios Educativos” para toda esta etapa educativa. Corresponde crear dos Direcciones Generales: la de Institutos y Escuelas de Educación Superior y Centros de Educación Técnico-Productiva; y la de Educación Superior Universitaria. Y direcciones vinculadas a la gestión de este viceministerio. El CNE-según las leyes- es el único órgano consultivo y especializado del Minedu. La Secretaría de Planificación Estratégica es una instancia fundamental de programación y asesoramiento del sector. No más.
